Mi amigo y yo nos damos placer con nuestros dedos

Hace unos días, decidí charlar con mi novia.Hablabamos de nuestra vida sexual y de cómo podíamos hacerlo un poco más excitante.De repente, ella sugirió que intentáramos darnos placer con nuestros dedos.Al principio, yo estaba un poco dubitativa, pero luego pensé, ¿por qué no?Eran ambas chicas y ambas sabemos cómo darnos placeres, así que, ¿porqué no probarlo unas con otras?Ella asintió y ambas nos levantamos del sofá.Empezamos tocándonos suavemente las áreas sensibles de las otras, explorando los cuerpos de los demás con nuestros deditos.Fue una experiencia increíble, ya que ambas podíamos sentir el placer de las otras a través de nuestro tacto.Pronto nos dejamos llevar y nuestros dedos se movieron más rápido, haciéndonos gemir a las dos en éxtasis.La habitación se llenó de nuestros gemidos y el sonido de nuestros dedos moviéndose al ritmo.Fueuna experiencia salvaje e intensa, una que ambas disfrutamos inmensamente.